Lo que prometía ser la última fiesta de un fin de año feliz para Rosario Central se convirtió este lunes en el escenario de disturbios cuando la policía quiso dispersar a un millar de hinchas canallas en el cierre del evento que el club organizó frente a la sede fundacional.
Así como los simpatizantes que estaban presentes cuestionaron las medidas que tomaron los efectivos para retirar a la gente que estaba sobre Avenida Alberdi, desde la Unidad Regional II informaron que hubo cinco uniformados heridos entre los que se contaba el comisario Daniel Acosta, jefe de Inspección de la Zona 2.
La velada que contó con bandas en vivo tuvo su pico de concurrencia entre las 20 y las 22, cuando cerca de veinte mil fanáticos de la Academia se acercaron hasta la zona vecina al Parque Scalabrini Ortiz en vísperas del aniversario de la fundación del club.
"Estaba acordado con el Ministerio de Seguridad que el festejo durara hasta la 1.30. La música se extendió y la venta de bebida siguió hasta las 2.05, así que pedimos que corten", apuntaron los encargados del operativo. Dos horas más tarde, ya sin personal de la Dirección de Tránsito, las fuerzas provinciales decidieron tratar de despejar la traza ante el remanente de público que había en la calle cerca de las cuatro de la mañana.
En un reportaje con LT8, Acosta responsabilizó a un grupo de hinchas que "llevaba mucho pirotecnia y se notaba que estaban un poco alterados". Según su relato, la chispa que encendió la mecha fue un botellazo hacia los uniformados cuando trataban de correrlos fuera de la avenida.
El propio jefe policial dijo que le pegaron una trompada desde atrás y cayó al piso en medio de los incidentes. Sin embargo, la peor parte se la llevó un agente que recibió otro botellazo en la nuca y recibió tres puntos de sutura. En total hubo cinco efectivos lesionados, aunque todos fuera de peligro.
La actuación de la fuerza de seguridad generó quejas de los hinchas de Central después de las corridas que se registraron hacia el viaducto de Bulevar Avellaneda. Sin embargo, desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) señalaron este lunes a la mañana que no se habían registrado personas detenidas en relación a los desmanes. Al mismo tiempo, la Fiscalía pidió informes sobre la labor policial durante la noche para investigar posibles delitos.