La despedida de un grupo de alumnos que partía en viaje de estudios a Córdoba este lunes se demoró más de lo previsto ante un operativo de control en el que descubrieron que uno de los choferes a cargo de llevar a los niños había bebido alcohol.
El procedimiento se llevó a cabo a partir de las sospechas de los padres y la Dirección General de Tránsito (DGT) fue la encargada de asistir a la puerta del Colegio La Salle, donde estaba reunido el contingente de primaria junto a sus familias antes de la partida.
Alrededor de las 2 de la mañana, los inspectores que acudieron a barrio Martin realizaron el test correspondiente y corroboraron que el conductor implicado tenía 0,89 gramos de alcohol por litro de sangre. A raíz del resultado, los agentes le retuvieron el carné y otro de los empleados de la empresa Alto Nivel se hizo cargo del volante para cumplir con el itinerario.
Desde la Secretaría de Control y Convivencia confirmaron que "es la primera vez" que la Municipalidad interviene ante un episodio como el que tuvo lugar en Alem al 1100 y añadieron que el caso del chofer quedó en manos del Tribunal de Faltas. "Afortunadamente pudimos prevenir y actuar de manera de garantizar la seguridad de todos los chicos", manifestó a través de un comunicado el titular del área, Guillermo Turrín.