General Motors suspendió a sus trabajadores por cinco días, debido al faltante de una pieza proveniente de Brasil. Sin embargo los empleados percibirán su salario y en principio está previsto retomar la producción ni bien se normalice el ingreso de insumos.
La noticia encendió las alarmas porque se temía que fuera el comienzo de una decisión más severa de la empresa. Pero el titular de Smata, Marcelo Barros, se encargó de despejar rumores. "Esto obedece a una situación puntual, no está en estudio eliminar un turno como dicen algunos", aclaró.
En diálogo con Vía Rosario, el sindicalista destacó que el problema es con unas piezas que GM importa de Brasil y envía a una firma de Pueblo Esther, encargada de fabricar los asientos para el Chevrolet Cruze II.
"Esto ya pasó antes y tiene que ver con demoras en la aduana, pero una vez que se normalice, se vuelve al trabajo normalmente", dijo. Concretamente los días en los que la producción estará paralizada serán del 27 de abril al 4 de mayo.
"Esto afecta a un grupo de trabajadores, no a todos, e igualmente percibirán el 100% del salario", manifestó.
Barros reconoció que el nivel de producción cayó el año pasado, cuando bajó de 27 vehículos por hora a 15, pero agregó que este año la cantidad no varió. "Ocurre que antes estaba el Agile y el Corsa, ahora solo quedó el Cruze II, y la demanda de Brasil no es alta", indicó.
"Hoy no corren peligro los turnos vigentes, pero habrá que ver cómo evoluciona la demanda a futuro", cerró.