En el día 26 por el juicio de Nora Dalmasso, fue citada Nidia Modesti, genetista forense del Poder Judicial, que tuvo a cargo el análisis de todas las muestras de la evidencia, como titular del laboratorio de biología molecular del Ceprocor. En su exposición, negó la presencia de semen en el cuerpo de la víctima y aseguró que hubo tres muestras de ADN en la escena del crimen que no se tuvieron en cuenta.
Modesti se diferenció del bioquímico policial Daniel Zabala quien, con la técnica de Fosfatasa Acida Prostática dijo haber hallado semen en las muestras tomadas en el cuerpo de Dalmasso. La profesional aseguró que esta técnica “suele dar falsos positivos” y que sus resultados son sólo “orientativos”.
En este sentido, recordó que ni el Ceprocor, ni Policía Judicial, ni el FBI hallaron semen en el cuerpo de la víctima. Modesti también reparó a que se haya tomado sólo una muestra de vagina, ano y vulva y fundamentalmente, cuestionó que todos los hisopos hayan sido introducidos en una suspensión de solución fisiológica, sin preservar parte de la muestra original para otros ensayos.
Presencia de otros ADN
El fiscal y la defensa reconstruyeron, día por día, todos los trámites que se llevaron a cabo con las muestras. Modesti detalló que las 29 personas que entraron a la escena del crimen no contaminaron la evidencia. Pero explicó que dicho estudio permitió detectar un “alelo nulo”, característico del linaje Macarrón.
Luego admitió que el FBI “completó el hallazgo del Haplotypo Y de Marcelo Macarrón” en “células epiteliales potencialmente espermáticas”, correspondientes a diferentes muestras de la evidencia: el cinto de la bata, la torunda de algodón (muestra externa de zona vulvar), las sábanas, etcétera. Donde detalló que este tipo de células pueden corresponder a relaciones previas de días anteriores al crimen.
A su vez, y como dato más significativo, la profesional citó que el laboratorio del FBI detectó tres ADN completos que no corresponden a Macarrón, en el cinto de la bata y en la sábana de abajo, uno femenino y otro masculino, que nunca se identificó a quien corresponderían.