Tras la confrmación de un caso de coronavirus de un empleado de la Aceitera General Deheza, la ciudad activó un estricto protocolo de seguridad, que incluye el hisopado a unas 50 personas que pudieron estar en contacto con el trabajador.
De esta manera, la Municipalidad ordenó el cierre de varias actividades aunque no se determinó un retroceso en la fase actual de la cuarentena, según explicaron las autoridades municipales y las del COE regional.
Mientras se aguardan los resultados de los test, Deheza aplicó una serie de restricciones, el aislamiento obligatorio de las personas que estuvieron en contacto con el camionero contagiado y en cuanto al comercio sólo podrán funcionar los rubros alimentos y farmacias.
El resto deberá cerrar sus puertas, al menos por toda la jornada de este jueves.
También fueron suspendidas las actividades recreativas y deportivas que habían sido autorizadas días atrás.
Esta prohibición también alcanza a bares y restaurantes, que deberán cerrar sus puertas y tampoco podrán abrir el fin de semana.
Por su parte, Aceitera General Deheza emitió un comunicado, confirmando que el contagiado es un empleado del área Logística y Distribución.
"En forma inmediata se aplicaron los protocolos definidos por las autoridades sanitarias e internos de nuestra actividad aislando a dicha persona, y se están evaluando los contactos directos que ha tenido en las anteriores jornadas tanto en la Planta como en la Comunidad para tomar las acciones que correspondan", comunicó la empresa.