El jefe de terapia intensiva del Perrando, Miguel Duré, falleció este viernes de coronavirus estuvo internado los últimos 23 días. Los profesionales que están en la primera línea de la trinchera vieron en él lo que viven a diario los profesionales de la salud ante una pandemia que azota fuertemente la provincia de Chaco.
El cuadro de Duré era delicado, un paciente de 53 años que padecía hace 15 días una insuficiencia respiratoria grave con falla renal, lo que obligaba a que deba ser dializado.
Duré fue el primer paciente del hospital Perrando internado en la unidad COVID que recibió plasma de convaleciente suministrado por la fundación que articula con la Salud Pública. Si bien en primera instancia la respuesta fue satisfactoria, luego surgieron otras fallas orgánicas que empeoraron su salud.
El médico, quien estaba a cargo de la terapia intensiva, estuvo más de 25 años al servicio a la Salud Pública. Desde su entorno y desde ámbitos no vinculados a la medicina se sumaron a las cadenas de oración que pedían por su recuperación.
Su fallecimiento fue confirmado mediante la red social Facebook por la Gremial Médica. El hombre sufría hipertensión, lo que lo ubicaba como un paciente de riesgo en el panorama del coronavirus.
La provincia chaqueña es la segunda más afectada por la pandemia de COVID-19. En el territorio de Chaco hay, hasta la fecha, un total de 1.475 los casos de coronavirus y se produjeron hasta el momento 81 fallecimientos.