En una decisión que es muy saludable para la transparencia del Estado, la presidenta del Superior Tribunal de Justicia del Chaco, Iride Isabel María Grillo, y la ministra de este cuerpo, Emilia Valle decidieron hacer públicos sus últimos recibos de haberes. Esto se generó para contrarrestar una publicación que se había viralizado y donde se habalaba de montos por encima de los 200 mil pesos. Lo cierto es que, papel en mano, con 36 años de antigüedad, la presidenta del STJ tiene haberes en bruto por 227.672,08 y cobra de bolsillo $ 178.710,58. En tanto, la jueza Valle, percibe como haberes en bruto por 221.018,66, quedándole de bolsillo $174.292,16.
Toda la documentación fue publicada en el sitio oficial del Poder Judicial del Chaco. Este gesto de transparencia de ambas juezas hasta ahora no fue imitado por sus pares Rolando Toledo y Alberto Mario Modi. En ambos casos tienen más años de antigüedad que sus colegas por lo cual se supone que sus ingresos sean superiores. Más aún, si a Toledo se le computa los años en que fue integrante de la Comisión de Asesoramiento Legislativo (CAL) órgano que durante la Dictadura militar reemplazó el rol de las legislaturas que habían sido cerradas por el Gobierno de facto.