El sábado por la mañana, muchos rafaelinos se vieron sorprendidos por la noticia de que los abogados Carlos Farías Demaldé y José Silvela habían renunciado a representar a la familia de la niña que denunció un abuso sexual en el Colegio San José, que depende del Obispado de Rafaela. Este hecho, que quedó comprobado por Cámara Gesell, ocurrió exactamente un mes antes de la noticia de la dimisión.
Una de las que se vio sorprendida por la noticia fue Vanesa, la mamá de la víctima. Ese mismo día brindó una entrevista a Aire de Santa Fe, en la capital provincial. Vanesa, quien por la tarde prefirió no hablar con los medios rafaelinos sobre el tema cuando fue consultada (tampoco dijo si nombraría a nuevos letrados para su querella), dijo a la mañana que se enteró por Instagram de la dimisión de sus letrados.
“Hoy recibimos una noticia: nos renunciaron nuestros abogados. Me entero por las redes. Imaginate la falta de respeto y de empatía. Es una jugada del Obispado, seguramente es coima. Sabemos que es un caso grave porque estamos yendo contra la Iglesia”, le contó a Geraldine Brezán.
“No hay ninguna duda. Mis abogados renunciaron y nosotros nunca nos enteramos ¿por qué lo harían más que por una coima? A nosotros también nos quisieron coimear del Obispado. Más o menos en distintas palabras nos ofrecieron una suma de dinero”, agregó.
Conocidas estas declaraciones, los abogados anticiparon que iniciarían una causa por “Calumnias e injurias”.