Hoy, la ciudadanía de Rafaela se ve sacudida por la denuncia de un supuesto abuso sexual a una niña de 7 años, alumna del segundo grado del Colegio San José. Pero, hace poco más de un año, ya se había denunciado públicamente un hecho similar, ocurrido en el 2001. Una denuncia que generó una respuesta por parte del Obispado que generó mucho descontento entre el alumnado.
“Me llamo Delfina de la Riva, tengo 30 años y a los 11 años fui abusada sexualmente por un Cura llamado Padre Ángel, sí, que contradictorio su nombre para un ser tan inmundo y perverso”, comienza el relato y agrega: “El Cura formaba parte de la escuela San José, de la ciudad de Rafaela, escuela católica, apostólica, romana. Sí, su Institución encubría un cura pedófilo. Este hombre usaba la casa de la Iglesia para abusar de mi cuando era niña. Uso la capilla y el nombre de Dios para ser impune, perverso y arruinar mi infancia”. Así empezaba el posteo, que hoy ya no está en las redes sociales.
“Estoy segura de que son más las mujeres que pasaron por el mismo horror en las manos de este cura, deseo con mi corazón que puedan sacarlo, hacerlo público, y que la Iglesia se haga responsable del sufrimiento que nos hicieron y hacen pasar, que revean sus prácticas y sus encubrimientos, y que dejen de permitir esta práctica habitual de que los hombres, con sotana o sin, nos usen, nos degraden y que no respondan por ello. Peor aún: que sean la autoridad moral de nuestra sociedad. Es hora de que dejen de mentir y que dejen de aniquilar nuestros derechos. A vos, mujer o varón, que pasaste por lo mismo que yo: te abrazo, y espero que puedas liberarte, como lo estoy haciendo yo ahora”, indica y remarca: “Este silencio me ha dañado por muchos años, me lo tragué sintiéndome una estúpida, una pelotuda, o que yo era la culpable. Gracias al laburo con mi Terapeuta la Dani, con su entrega total; a mis Amigas, mi sostén; a mi Grupo Les fénix, donde ardimos y renacimos; y al Feminismo”.
“Me han Salvado. Hoy lo puedo gritar bien fuerte. Las mujeres callamos muchísimos años, y a los silencios, no volvemos Nunca Más”, cerró.
La respuesta del Obispado
El Colegio San José depende directamente del Obispado de Rafaela, que se encuentra casi en frente de uno de los laterales, sobre calle Necochea. Al día siguiente del posteo, el 24 de Julio del 2020, emitió un comunicado tras la denuncia realizada en las redes sociales. Si bien se mostró dispuesto a colaborar en una posible investigación que realice el Estado, pero le pide a la víctima que oficialice su imputación ante el Estado.
“El Obispado de Rafaela ha tomado conocimiento, a través de la difusión por medio de las redes sociales, de las declaraciones efectuadas por una persona mayor de edad a través de un posteo de facebook que se ha viralizado”, dice el comunicado y agrega: “Según sus propias referencias -efectuadas en la difusión indicada- afirma haber sido abusada sexualmente dentro del ámbito de una institución eclesial cuando era alumna del establecimiento”.
“Al respecto deseamos manifestar que la realidad de los abusos duele, y de ninguna manera debe ser ocultada ni encubierta. Por ello consideramos necesario que la persona antes mencionada realice las denuncias pertinentes ante los organismos estatales correspondientes, a los fines de que se abra una investigación y pueda llegarse a la verdad. “…Si ustedes permanecen fieles a mi Palabra, serán verdaderamente mis discípulos: conocerán la verdad y la verdad los hará libres”. (Juan 8, 31-32). Como Iglesia Diocesana colaboraremos en todo lo que esté a nuestro alcance”, concluye.
Como se puede observar, no anticipaban en el comunicado una investigación interna, dentro del propio Colegio. No la hubo.
La postura del alumnado
Días después, el 10 de agosto, alumnos y ex alumnos del Colegio San José dirigieron una carta a la dirección de todos los niveles (inicial, primario y secundario) en donde marcaron el “extremo descontento” por el accionar de la institución educativa, tras la denuncia pública de una ex alumna de un abuso sexual, cuando tenía 11 años, por parte de un cura que trabajaba allí.
En la misiva, los alumnos y exalumnos manifiestan que no se está cumpliendo con la legislación vigente en materia de educación sexual y que esto no permite un ámbito que se predisponga a escuchar casos como este. Al mismo tiempo, solicitan “a las autoridades del Colegio un llamado a la reflexión y a la autocrítica, y que se tomen las medidas necesarias para revertir estas situaciones y evitar las futuras”.
El texto completo de ese comunicado lo podrás leer aquí.