Un joven de 18 años fue brutalmente agredido este domingo mientras esperaba junto a sus amigos un remisse a la salida de un boliche de Cañuelas, provincia de Buenos Aires. El ataque fue provocado por un grupo de diez personas que lo dejó inconsciente.
“Cuando veía que nos venían a buscar entre un montón, se me pasó por la cabeza lo de Fernando (Báez Sosa) que me podía pasar también a mi”, relató en diálogo con TN Demián Páez en relación al adolescente asesinado a golpes en Villa Gesell por un grupo de rugbiers, los mismos que están siendo juzgados en Dolores.
El ataque de Demián ocurrió sobre la colectora de la ruta 205, entre las 5:30 y 6:30 de la mañana y, aunque quedó registrado por una cámara de seguridad, aún no pudieron determinar quiénes fueron los agresores.
En las imágenes se ve que a la víctima tendida en el suelo hasta que un auto frena y lo traslada al Hospital Cañuelas, donde finalmente lo atendieron.
“Nosotros ya habíamos salido, estábamos tranquilos esperando que llegue el remis. De la nada nos empezaron a gritar, a decir cosas, a buscarnos para pelear. Escuchaba que nos gritaban cosas. Nos empezamos a alejar porque no queríamos hacer ningún quilombo y ellos nos siguieron como una cuadra hasta que alcanzaron y nos golpearon”, manifestó.
“No sabemos muy bien quiénes son. No los conocemos, nunca los vi yo. Nunca los cruzamos ni tuvimos un problema con nadie”, explicó y dijo que no intervino personal de seguridad del local bailable porque “ya había cerrado”.
En ese sentido, precisó: “Ya había pasado un rato de que salimos del boliche. Estábamos esperando el remis y nos fueron a buscar. Nos vieron ahí solos y nos vinieron a pegar”.
Sobre el momento del ataque, describió: “En ese momento, veía que me querían venir a pegar y yo solo me cubría. Me acuerdo solo de uno. Yo le decía que se calme. Después de eso vino otro que me pegó y ya no me acuerdo más nada”.
Lo dejaron inconsciente y se burlaban
Lucía es una de las amigas de Demián que presenció el ataque y brindó detalles del momento. “Él estaba desmayado, lo habían noqueado y me tiré arriba de la cabeza de él porque le querían seguir pegando. Hasta a mi me decían que me iban a pegar, que me corra, que me iban a romper los nudillos y un montón de insultos y barbaridades”, expresó.
Y agregó: “Uno de campera de River me decía ‘está muerto, está muerto’. Se burlaban. En la desesperación no les daba pelota”.
Por su parte, Cinthia, madre de Demián, realizó la denuncia en la Comisaría 1ra. y busca a testigos que se acerquen para identificar a los atacantes.