Dr. Ricardo González habla sobre cómo convivir con un animal de compañía

¿Quién puede dudar hoy, lo útil y saludable que es compartir nuestras vidas con un animal de compañía?. El Dr. Ricardo González reflexiona sobre la importancia y la responsabilidad a la hora de llevar un perro o gato a tu hogar.

Dr. Ricardo González habla sobre cómo convivir con un animal de compañía
Persona con su perro.

Estos últimos años, las estadísticas reflejan el incremento de hogares en los cuales vive una sola persona. Una excelente compañía podría ser un perro, un gato u otro animal doméstico; si están dadas las condiciones. Solo para dar un ejemplo; de todo lo que puede significar afectivamente para una persona mayor, porque en muchos casos y en estos tiempos donde la soledad y el aislamiento son monedas corrientes , pasan a ser para ellos, unas de las razones por quien y para quien vivir.

Todo lo que aportan a chicos con capacidades diferentes, sólo su presencia y sus caricias logran muchas veces lo que la ciencia no puede conseguir.

La caricia a un animal de compañía baja la presión arterial y mejora el estado de ánimo, esto está comprobado científicamente.

La interacción afectiva humano-animal despierta los mejores sentimientos en nosotros, pero no debemos” humanizarlos”, para no caer en el riesgo de esperar de ellos actitudes que no son inherentes a su naturaleza, esto puede ser frustrante para nosotros y no conduce a una sana relación.

Entonces se impone que nos hagamos estas preguntas: ¿Cuáles son las condiciones que tienen que darse para que podamos compartir nuestras vidas con un animal de compañía?

  • Debemos tener en cuenta, el espacio físico para que nuestro animal de compañía pueda descargar sus energías en relación a su tamaño.
  • Indispensable que nos asesoremos bien antes de traerlo a casa, para decidir correctamente cuál es el animal que mejor se adapta a nuestra familia, teniendo presente que nosotros debemos cubrir sus necesidades básicas.
  • Consultar si están todos o al menos la mayoría del grupo familiar de acuerdo con su llegada, porque es una decisión importante para los próximos 10,15 o más años, ya que debemos actuar con responsabilidad y hacernos cargo de ellos. Esto no es solamente darle de comer, agua y un poco de afecto.
  • Debemos criarlos, educarlos, bañarlos, controlar su reproducción, atención veterinaria; lo cual nos demandará tiempo y recursos económicos.

En síntesis tener un animal de compañía es una opción (no una obligación) Para ello debemos ser conscientes y responsables al tomar la decisión; porque si nos equivocamos, nos arrepentiremos, algunos de ellos pasarán a engrosar las filas de los “abandonados” que deambulan día y noche por nuestra ciudad.

Si están dadas estas condiciones, adopte un animalito de compañía de los que permanentemente están buscando un nuevo hogar.