En la primera jornada de debate se dio lectura del requerimiento de elevación a juicio efectuado por la Fiscalía. Luego fue el turno de la declaración del imputado, quién ratificó el escrito presentado por su defensa, alegando que no tuvo nada que ver con el homicidio.
Leopoldo Borovski es el único imputado, está acusado de “homicidio agravado por razones de género”, el juicio, que inició ayer miércoles, se lleva adelante en el Tribunal Penal 1 de Oberá.
Fiorella Itatí Aghem de 20 años, fue encontrada asesinada un lunes 4 de marzo al mediodía, en una chacra de San Vicente, tras cuatro días desaparecida. La encontró un colono que realizaba tareas de pulverización en un yerbal.
Leopoldo Borovski de 22 años, era su ex novio, con el cual mantenía una relación conflictiva de la menos tres años, con antecedentes de violencia de género. Al momento del hecho, ambos jóvenes tenían una orden de prohibición de acercamiento mutuo por 180 días.
Las audiencias se llevan a cabo en el Tribunal Penal 1 de Oberá, integrado por los jueces Francisco Aguirre, José Pablo Rivero y Miguel Moreira. El Ministerio Público Fiscal está representado por la fiscal, Estela Salguero. En tanto, el imputado es defendido por los abogados, José Rufino Aranda y Marcos Fabián Hirch.
En total declararon cinco testigos ayer en el juicio oral y público, que complicaron la situación del sospechoso, que de hallarse culpable, se podría enfrentar a la pena de prisión perpetua.
El debate proseguirá hoy jueves con las testimoniales de otros cinco testigos, tras lo cual será el turno de la Fiscalía y la defensa con los alegatos y el Tribunal definirá, el momento en que dará a conocer la sentencia.
Las pruebas que complican al sospechoso son manchas de sangre en la camioneta de Borovski, el domingo 3 de marzo, tras la investigación por la desaparición de Fiorella.
El 4 de marzo, el sospechoso fue aprehendido en El Soberbio, tras haber regresado de un viaje a Brasil que había realizado el viernes 1 de marzo, un día después de la desaparición de la joven, donde había concurrido a un encuentro de jeeps en la ciudad de Horizontina.
El informe de autopsia concluyó que la víctima falleció por “asfixia por ahorcamiento por estrangulación”, el cuerpo de la joven tenía un lazo de un cable muy ajustado alrededor del cuello; la cabeza y la cara estaban muy hinchadas por el edema producto de la estrangulación. Tenía tres cortes superficiales en el tórax, en la parte inferior del lado izquierdo.