En las últimas horas informaron que suspenden hasta el 31 de mayo el segundo juicio por los abusos del Instituto Antonio Próvolo. Y los abogados de las víctimas elevaron un pedido formal para que el tribunal les explique en lenguaje de señas qué ocurre puertas adentro del juicio.
//Mirá también: Acusaron a un juez y a fiscales por burlarse de la monja Kumiko Kosaka
Fue luego de lo ocurrido con la denuncia de los abogados de la monja Kumiko Kosaka, una de las 9 imputadas por los abusos. Es que el juez Horacio Cadile, quien estaba referido al caso, decidió aceptar inhibirse a sí mismo de seguir actuando en la causa, tras haber salido a la luz unos chats en los que junto a algunos fiscales se burlaban de la imputada.
Junto con el escrito que presentó Cadile, también se oficializó la nueva suspensión del juicio hasta el 31 de mayo “a los fines de proceder a la integración del Tribunal”.
Es que al apartarse Cadile, la presidencia del tribunal quedaría en manos de la jueza Gabriela Urciuolo, quedando secundada por los jueces Rafael Escot y Belén Salido, quien hasta hoy era la primera suplente.
// Mirá también: Caso Próvolo: rechazaron la recusación del juez Cadille planteada por la defensa
Los abogados de la monja presentaron al inicio de la jornada de juicio una denuncia con capturas de un chat privado integrado por Cadile y algunos fiscales del Ministerio Público Fiscal de Mendoza.
Y a través de las capturas de pantalla que se presentaron los letrados, el propio Cadile habría respondido a uno de los mensajes -en lo que intentó ser tono de broma- “Kumiko y yo somos amantes”. A partir de esto, los abogados solicitaron que el juez se aparte de la causa por lo que luego de esta denuncia, el propio Cadile optó por inhibirse.
*Este texto fue publicado originalmente por Los Andes. Se reproduce aquí con la autorización correspondiente.