"Para mí es una alegría, toda una experiencia. Siempre hemos trabajado en las peleas de los trabajadores. Me han recibido de una manera muy cordial", contó Blas a los medios al ingreso del establecimiento escolar.
“Sé que cuento con trabajadores que han puesto todo. La educación pública se sostiene con lo que hacen ellos mismos, los presupuestos siguen siendo miserables. Con mucha alegría y con mucho respeto a los chicos y a la familia".
Blas enfrentó a los micrófonos de la prensa y se mostró arrepentida de haber apoyado a Macho para llegar al frente de ATE, "nunca previmos que íbamos a estar en esta entrega de ATE a manos de un gobierno". " Pero no me arrepiento de poner el pecho por los trabajadores, fueron años en los que avanzamos mucho y ahora estamos perdiéndolo", finalizó.