La mujer llegó el jueves pasado a la guardia del Hospital Lagomaggiore caminando, acompañada por su familia y con una hemorragia de tres días y fiebre.
Quedó internada en coma inducido, sedada y con pronóstico reservado. Las primeras versiones indicaban que se había practica un aborto clandestino.
Ayer, desde el nosocomio dieron a conocer que la mujer se recupera satisfactoriamente y que ya se le comenzaron a retirar los sedantes y la intubación.
El propio marido fue el encargado de refutar los rumores sobre la práctica de un supuesto aborto clandestino. Fuentes del ministerio aseguraron que la pareja de la mujer les confirmó que desconocían absolutamente el embarazo, por lo cual creen que es muy difícil que la paciente haya accedido a practicarse el aborto.
Es por esto que los familiares pidieron al hospital no difundir más partes médicos y que el caso volviera a la esfera de la privacidad de los involucrados.