Por dinero, se abrió un inesperado conflicto interno entre el diputado nacional Ramón y el Partido Intransigente. Lo que sucede es que la Nación liquidó más de 750.000 pesos por el desempeño electoral de Protectora. El diputado nacional quiere guardar el 80 por ciento para su campaña a gobernador del año que viene, pero el PI se quiere quedar con la totalidad de los fondos.
La disputa se generó a partir de la liquidación del Fondo Partidario Permanente, un dinero que el Gobierno Nacional distribuye entre todos los partidos del país para el "desenvolvimiento institucional" de las fuerzas políticas y que se reparte de acuerdo al desempeño de cada una en la última elección de diputados nacionales.
Esa plata abrió un inesperado conflicto interno, ya que el PI tiene decidido quedarse con el dinero y utilizarlo para "fortalecer su estructura". Pero Ramón piensa lo contrario: pretende que el 80 por ciento sea manejado por la "jefatura de campaña". Es decir, por Protectora.
Quien salió a defender la decisión de que el PI acapare los 750 mil pesos fue el diputado provincial Eduardo Martínez Guerra, quien es apoderado del partido en Mendoza. Según Martínez Guerra, el dinero lo tiene que cobrar el partido que "puso la personería" y que debe rendir cuentas por su uso.
Recalcó el legislador que este fondo se encuentra sujeto a auditorías muy detalladas y dijo que "puede ir preso el que se hace responsable" del manejo del dinero. "La plata la tiene que gastar sí o sí el partido y eso no lo puede decidir Ramón", afirmó.