Gabriela Rodríguez dijo que el 8 de junio a las 15.20 había desparecido su hijo y que le exigían para liberarlo la suma de 150 mil pesos que debía dejar a las 18 en un tumba del cementerio de San Rafael, e involucró a otras personas.
El fiscal que entendió en la causa, doctor Federico Baquioni, abocado a la investigación del hecho y la valoración de la prueba, llegó a la conclusión que fue un secuestro extorsivo pergeñado por la denunciante.
El menor no fue secuestrado, porque nunca fue sustraído, retenido u ocultado del ámbito de custodia de su madre Gabriela Rodríguez.
Señalada el fiscal que hay sobrados elementos de prueba que indican que su madre sabía dónde estaba y con quién, pues sus acciones y comportamientos posteriores indican que pretendió simular el secuestro inexistente para la obtención de un provecho económico personal.
La hipótesis que surge de acuerdo a la investigación es que Rodriguez, intentó sacarle dinero a su ex pareja, Daniel Muñoz, padre del menor. A quien le venía reclamando dinero.
