Por medio de un comunicado, los trabajadores coordinadores y talleristas de los Centros de Actividades Juveniles (CAJ) y los Centros de Actividades Infantiles (CAI) manifestaron su profunda preocupación ante la "alarmante situación en que se encuentran los programas socio educativos de la provincia de Córdoba".
Ambos depende, en su gestión y financiamiento, del Ministerio de Educación de la Nación y de la provincia de Córdoba.
Quienes forman parte de estos centros de actividades denuncian que "(...) los responsables ministeriales no han informado sobre la continuidad de los programas".
En las altas esferas todo es silencio y falta de respuesta.
Esta situación afecta a 70 C.A.I de escuelas primarias y 350 C.A.J de escuelas secundarias, abarcando a 20 mil alumnos y 2500 trabajadores/as.
Además, la nota manifiesta que "en los últimos años, estos programas vienen sufriendo las políticas de ajuste y vaciamiento de la Educación Pública (...)".
Los trabajadores exigen a los responsables una inmediata respuesta sobre la continuidad de los talleres, ya que corren riesgo miles de fuentes laborales y el espacio educativo.
Por último, el comunicado expresa: "C.A.I y C.A.J son un derecho y no un gasto. No al cierre y al vaciamiento del C.A.I y C.A.J en la provincia de Córdoba. No a la pérdidas de los puestos de trabajo. Queremos más y mejor escuela".