En medio de la crisis en la que se encuentran sumergidos los gastronómicos de Mar del Plata, cuyos locales solo tienen atención mediante delivery y take away desde el inicio de la pandemia de coronavirus, la historia de uno de los referentes del sector conmovió a los comerciantes que insisten con la reapertura bajo un protocolo que ya fue elaborado pero el gobierno provincial rechazó.
Walter Bertinat, propietario del Café Manotas, de la zona céntrica, debía varios meses de alquiler, había sido intimado a abandonar el inmueble, pero una sorpresa de sus colegas lo salvó. Los gastronómicos iniciaron una colecta solidaria y recaudaron miles de pesos que lo ayudaron a regularizar sus cuentas.
En un video que grabaron los mismos gastronómicos cuando fueron a "darle la sorpresa", Walter, quien encabezó las manifestaciones del sector vestido con su uniforme de trabajo, se emocionó hasta las lágrimas y no pudo expresar más que frases entrecortadas a sus colegas.
En las imágenes que difundió el sitio Ahora Mar del Plata, el mozo agradeció la unidad de los trabajadores gastronómicos y consideró que el gesto que tuvieron con él lo dejó "sin palabras". "Trato de defender lo que hago a muerte. No tengo palabras, mil gracias por todo lo que hacen", expresó el trabajador en un video que fue posteado en un grupo de Whatsapp entre comerciantes de la ciudad balnearia.
Walter recibe la caja, cuya suma no quisieron difundir, y se larga a llorar. Incluso se muestra contenido por las ganas de abrazar a sus colegas.
La iniciativa surgió en el grupo de Whatsapp que integran más de 200 gastronómicos marplatenses y donde coordinan acciones para visibilizar la ola de cierres e insistir con la reapertura.
Los gastronómicos emprendieron una campaña digital con el lema "Abrimos o cerramos", para visibilizar sus reclamos fuera de las fronteras e incluso montaron un restaurant a cielo abierto frente a la Municipalidad para reclamarle a los concejales que les permitan un permiso provisorio para ejercer sus funciones.
El reclamo de los gastronómicos no va dirigido solamente al gobierno municipal y provincial, sino también a los concejales de Mar del Plata y Batán que trascendió que están elaborando una ordenanza en el que se habilitaría de manera precaria, un permiso de apertura.
Pese a que los locales gastronómicos están cerrados desde el inicio de la pandemia de coronavirus y solo pueden hacer take away o delivery, la Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP) de Mar del Plata informó una caída de las ventas del 76% en mayo, con una variación interanual medida en existencias.