Dentro de un mes, la distribuidora Torres y Liva volverá a abrir sus puertas en un predio de ruta 88, después del incendio del pasado 15 de diciembre de 2019 que arrasó con sus instalaciones y decenas de viviendas linderas.
Según confirmó el titular de la firma, Carlos Torres, al Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) de Mar del Plata, 43 empleados serán los encargados de llevar adelante la nueva etapa de la distribuidora. Cabe resaltar que muchos de ellos se acogieron a retiros voluntarios.
La nueva planta se instalará, según confirmó 0223, en un predio que está sobre la ruta 88, entre la avenida Vértiz y Fortunato de la Plaza que ya está acondicionado y ultima detalles para reactivar la venta de productos en Mar del Plata y la zona.
El SEC también sugirió una expansión de la firma con e-commerce para que sus ventas se reimpulsen rápidamente después de 2 meses de incertidumbre sobre su futuro. "La intención es fomentar el negocio electrónico como parte de su expansión. Sabemos que el comerico electrónico es una pata importante; todavía no tiene mucho desarrollo pero en un par de años va a ser preponderante en cualquier emprendimiento", explicaron desde la entidad que conduce Guillermo Bianchi.
Las tareas de demolición en el ex predio ubicado en 20 de Septiembre y Rivadavia culminaron el 13 de febrero, mientras que las tareas del Grupo Mitre fueron costeadas por la Municipalidad quien planea reclamarle a la aseguradora de la firma todos los gastos de este proceso.
La investigación del siniestro ocurrido en la noche del domingo 15 de diciembre quedó a cargo del titular de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) Nº6, Juan Pablo Lódola, quien sostiene la hipótesis de que el incendio fue provocado adrede y por un único responsable: Néstor Gustavo Arrativel, un hombre en situación de calle de 53 años que ya tiene antecedentes por intentos de ataques de similares características.
Al sospechoso se le imputó el delito de "incendio agravado por la puesta en peligro de más de cien personas", que contempla una pena en expectativa de entre 3 y 15 años de prisión.
En las últimas semanas, Lódola ordenó la realización de medidas complementarias para ampliar la pericia psiquiátrica sobre Néstor Gustavo Arrativel y cerrar la instrucción penal preparatoria.
De acuerdo a esos resultados se definirá si se acompaña el pedido de declaración de inimputabilidad sobreseimiento hecho por la defensa oficial o si avanza en la realización de un juicio oral para definir los pasos a seguir y el dictado de una internación porque representa un peligro para terceros.
