Siguen las repercusiones en el Barrio Jardín por lo que fue la violenta muerte de Nicolás Pérez Gatti, quien trabajaba como repartidor de la pizzería La Italiana, y fue asesinado de un disparo en la cabeza el sábado pasado.
Ante rumores que enlazaron al hecho con un ajuste de cuentas, la familia salió a hablar para negar de plano esa posibilidad.
"Nada que ver, no porque fuese mi sobrino", señaló Alejandro, tío de la víctima: "En Villa Elvira lo conocen y sabe que era un chico sano, no tenía maldad en nada. Hacía estas changuitas para lo de él, del día a día", remarcó, en diálogo con FM Cielo.
Nicolás había sido abordado en la puerta de una casa ubicada en 81 entre 116 y 117, poco después de entregar el pedido con su moto. Fue el propio dueño de la vivienda el que escuchó el ruido del disparo, y al salir al frente, vio al joven con la herida en su cabeza.
De acuerdo a los testimonios de la familia, el joven llevaba apenas dos meses trabajando en el local gastronómico, con uno de sus primos y un amigo.
En tal sentido, Alejandro sostuvo que el desgraciado hecho "le podría haber pasado a cualquiera de los tres".