La causa del avión venezolano iraní que continúa retenido en Ezeiza avanza en Paraguay y el presidente de ese país, Mario Abdo, dio detalles de la causa. Además, apuntó que uno de los tripulantes “se cambió la cara” en una operación que se habría llevado a cabo en Cuba.
De esa manera, el mandatario guaraní señaló que “gran parte de esa tripulación tiene vínculos con el terrorismo”. Además, destacó la labor de los servicios de inteligencia paraguaya que detectaron el vuelo y a quienes llevaron.
“Más cosas se van a saber en el tiempo, la inteligencia paraguaya hizo un gran trabajo para determinar la peligrosidad de este vuelo y desde que informó y alertó se pudieron hacer averiguaciones”, señaló Abdo en diálogo con el diario paraguayo ABC el pasado miércoles.
Luego de aquella declaración, en una breve conferencia de prensa, Abdo se refirió a los dichos que llegaron desde Irán tras las denuncias por este avión de la empresa Conviasa, aerolínea venezolana dueña de la nave de Emtrasur retenida en la Argentina y vinculada por los Estados Unidos con la organización terrorista Hezbollah.
“No preocupa lo que Irán dijo. La cancillería contestó. Paraguay tiene un compromiso decidido en la lucha contra el crimen internacional, no importa qué países sean, no es una cuestión contra ningún país, la lucha es contra el crimen internacional y el terrorismo”, señaló.
Un tripulante se habría cambiado la cara en Cuba
Si bien parece increíble, hasta “de película” como señaló Abdo, ahora fue la primera voz oficial en confirmar que todo indicaría que uno de los tripulantes del avión iraní se habría “cambiado la cara” en Cuba hace algunos años. Esta versión ya circulaba en Buenos Aires, pero no había ningún dato que confirme este dato.
El tripulante al que se alude es Mohammad Khosraviragh, de 39 años, que está en Ezeiza desde el 6 de junio y había integrado también el grupo de aviadores que pasó tres días en Ciudad del Este en mayo.
Para quienes confirman esta hipótesis, que ahora se vio con mayor fuerza por Abdo, difunden una imagen del pasaporte presentado por Khosraviragh en Ezeiza y otra foto de una credencial que en teoría corresponde al copiloto del avión de Emtrasur. No se parecen a simple vista. Pero las fuentes que promueven esta versión indican que se trata de la misma persona porque así lo prueban análisis de reconocimiento facial e inteligencia artificial.