Una tarde de terror ocurrió en Tailandia después de que un hombre ingresara a un jardín de infantes con armas y cuchillos donde llegó a matar a 34 personas, entre ellos, según informaron agencias, 23 niños de entre dos y tres años. El objetivo fue matar a su familia y una vez que lo logró se suicidó, agregaron los investigadores.
El atacante fue identificado como Panya Khamrab, un expolicía de 34 años, que entró armado al establecimiento cuando los chicos estaban durmiendo la siesta, cerca de las 12.30 del mediodía, y comenzó a disparar. El último comunicado de la Policía sobre el suceso ocurrido alrededor del medio día, hora local, informó además de 15 heridos, ocho de ellos en estado grave.
Después de la masacre, el atacante volvió a su casa, mató a su mujer y a su hijo, y por último se suicidó, explicó el coronel Jakkapat Vijitraithaya, jefe de la policía provincial.
Quién era el expolicía que mató a 34 personas en Tailandia
El sospechoso, de 34 años y que fue apartado del cuerpo por posesión de drogas, se suicidó tras el ataque, detalló la Policía en su cuenta de Facebook. “Confirmamos que el criminal se disparó a sí mismo y ha muerto”, apuntó el comunicado, mientras que los servicios de rescate detallaron que antes de quitarse la vida también mató a su mujer y su hijo.
El presunto asaltante disparó con un rifle automático a los presentes en una escuela infantil localizada en la provincia de Nongbua Lamphu, que generalmente acoge a niños de entre 2 y 5 años, antes de darse a la fuga en una furgoneta.
La mayoría de los heridos fueron trasladados al hospital Nong Bua Lamphu, que ha solicitado “con urgencia” que los ciudadanos donen sangre de todos los tipos, según medios locales.
El primer ministro Prayuth Chan-ocha ofreció sus “más profundas condolencias” a las familias de las víctimas y los heridos. “Ordené al jefe de policía que acudiera de inmediato a la zona y que todos los organismos relacionados ayudaran a todos los afectados con urgencia”, dijo.