El huracán Hilary se acerca hacia la península de Baja California, en el noroeste de México, como tormenta de categoría 1 mientras los meteorólogos alertaron que podría causar inundaciones “catastróficas” y azotar como tormenta tropical el suroeste de Estados Unidos.
En su reporte más reciente a las 5 de la mañana, el Centro Meteorológico de Estados Unidos indicó que Hilary se encontraba “muy cerca” de Ensenada, en el sur de la península, a 460 kilómetros (285 millas) de San Diego, California. Sus vientos máximos eran de 130 km/h (80 mph) extendía sus “intensas lluvias” sobre la península.
Los meteorólogos advirtieron que, a pesar de debilitarse, la tormenta seguía siendo engañosa. Una persona murió ahogada el sábado en la localidad mexicana de Santa Rosalía, en la costa este de la península bajacaliforniana, cuando un vehículo fue arrastrado por las aguas de un arroyo desbordado. Los socorristas lograron rescatar a otras cuatro personas, indicó Edith Aguilar Villavicencio, alcaldesa del municipio de Mulege.
De momento se desconoce si las autoridades consideraron que la muerte estaba relacionada con el huracán, pero un video publicado por funcionarios locales mostraba torrentes de agua corriendo por las calles de la ciudad.
De acuerdo con los meteorólogos, sería la primera tormenta tropical que azota el sur de California en 84 años, y se espera que traiga consigo inundaciones repentinas, deslizamientos de tierra, tornados aislados, fuertes vientos y apagones generalizados.
El pronóstico llevó a las autoridades a emitir un aviso de evacuación para la isla de Santa Catalina, instando a los residentes y bañistas a abandonar el destino turístico a 37 kilómetros (23 millas) de la costa.
Elizabeth Adams, meteoróloga de la oficina del Servicio Meteorológico Nacional en San Diego, dijo que la lluvia podría caer hasta 7,62 centímetros (3 pulgadas) por hora en las montañas y desiertos del sur de California, desde el domingo por la mañana hasta la tarde. Las intensas lluvias durante esas horas podrían causar inundaciones repentinas generalizadas y potencialmente mortales.
El gobernador de California, Gavin Newsom, proclamó el estado de emergencia y las autoridades exhortaron a la población a terminar sus preparativos cuanto antes.
El huracán es el más reciente desastre climático importante que causa estragos en Estados Unidos, Canadá y México.
La isla de Maui, en Hawai, aún se recupera del incendio de la semana pasada que mató a más de 100 personas y arrasó con la ciudad histórica de Lahaina, convirtiéndolo en el incendio forestal más mortífero de Estados Unidos en más de un siglo. En Canadá, los bomberos continuaron combatiendo las llamas el sábado durante la peor temporada de incendios registrada en la nación.
Hilary generó fuertes lluvias e inundaciones en México y al suroeste de Estados Unidos el sábado, antes del esperado cruce fronterizo de la tormenta el domingo. Los meteorólogos advirtieron que podría arrojar hasta 25 centímetros (10 pulgadas) —el equivalente a un año de lluvia para algunas áreas— en el sur de California y el sur de Nevada.
”Esto no disminuye la amenaza, especialmente la amenaza de inundaciones”, dijo Jamie Rhome, subdirector del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, durante una sesión informativa el sábado para anunciar el estado degradado de la tormenta. “No hay que permitir que la tendencia de debilitamiento y la intensidad los invite a bajar la guardia”, agregó.
La Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden había sido informado sobre los últimos planes de preparación antes del paso del huracán a Estados Unidos. “Insto a todos, a todos en el camino de esta tormenta, a tomar precauciones y escuchar la orientación de los funcionarios estatales y locales”, señaló Biden.