En la jornada de ayer y tras un arduo trabajo por más de 7 horas, la Policía de Misiones logró retirar el cuerpo de un peón rural que se encontraba en un pozo de agua, a doce metros de profundidad. Ocurrió en San Antonio.
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Después de siete horas de trabajo por parte de personal de Bomberos y de la Policía, el cuerpo de un hombre fue recuperado de un pozo de agua de 12 metros de profundidad. El cuerpo se encontraba en avanzado estado de descomposición y fue identificado por el hijo del fallecido, Rogelio Ismael E., como su padre Rogelio Brítez.
Después de examinar el cuerpo, el médico de guardia del hospital local informó que presentaba lesiones de arma blanca en la región hemicara izquierda, lesiones en la yugular y en la región torácica, así como una herida profunda en la espalda. Se estima que el tiempo de muerte fue de entre seis y siete días.