Sigue el calendario vendimial en Mendoza. Este sábado pasado fue el turno de Guaymallén, donde se vivió una fiesta llena de homenajes pero sin la elección tradicional de una reina nacional de la Vendimia.
Toda la noche se trató de homenajear diferentes personalidades guaymallinas que dejaron su marca en la historia del departamento. El espectáculo se centró en Melchora Lemos, que fue considerada la primer empresaria vitivinícola de la provincia.
Más de 200 artistas participaron para hacer realidad su historia, llena de música, danza y teatro, de la mano de una producción original a cargo de Carlos Escoriza.
La historia se remonta al siglo XVII, en una sociedad totalmente patriarcal. En ese contexto, Melchora logró hacerse de un lugar respetable y forjar parte de los cimientos de la industria vitivinícola en la provincia, introduciendo las primeras barricas de roble y el primer molino en Mendoza.
Asimismo se homenajearon a Luis Quesada y Gladys Ravalle, quienes fallecieron en enero. Fueron dos artistas esenciales al forjamiento cultural del departamento, trascendiendo y representando a Mendoza ante el mundo.
En honor y agradecimiento a esos artistas el intendente Marcelino Iglesias y el escultor Federico Arcidiacono entregaron a sus familiares dos piezas talladas en madera, que representan al ser Huarpe. Además, se encuentran en tratamiento de ordenanza las designaciones “Parque Costero Luis Quesada” y “Plaza Gladys Ravalle”, dos espacios verdes ubicados en el distrito El Bermejo.
La polémica de las reinas
El municipio de Guaymallén siguió al pie de la letra la ordenanza que ellos aprobaron para que no se eligiera más reinas - de cualquier festejo - en el departamento.
Los vecinos, indignados por la situación, decidieron elegir su soberana sin el aval del municipio, en el departamento vecino de Maipú. La joven elegida, Julieta Lonigro, busca ser reconocida oficialmente para que pueda participar del festejo central.
Desde Guaymallén parece ser que no van a aflojar, pero el tema se tornó político. A través de una carta abierta, el PRO cuestionó la ordenanza que prohibe la elección de las reinas en el departamento y solicitó el reconocimiento de la reina elegida por el pueblo, Julieta.
Y para responder a quienes ven a la figura de las candidatas como “violencia y denigración de la mujer”, la carta argumenta: “No vemos ex reinas que se sientan denigradas por su participación vendimial, al contrario, observamos ex soberanas con roles centrales, unas juezas, otras al frente de algún municipio, protagonistas en el periodismo u otras profesiones”.