Con acusación de mala praxis, portación de arma y adicciones cesantearon a un médico en Entre Ríos

Al profesional de la medicina le comprobaron causales de toxicomanía y negligencia, por lo que el Ministerio de Salud inició gestiones para retirar su matrícula profesional, con el fin de impedir que pueda volver a ejercer en la provincia.

Con acusación de mala praxis, portación de arma y adicciones cesantearon a un médico en Entre Ríos
Hospital Gualeguaychú

El Gobierno de Entre Ríos resolvió en las últimas horas, la cesantía para el médico Horacio Esteban San Miguel, quien ejercía su profesión en el Hospital Centenario de Gualeguaychú. El sumario administrativo comprobó causales de toxicomanía y negligencia manifiesta.

San Miguel, se desempeñaba como suplente en la guardia del Hospital Centenario y a partir de esta decisión que se formalizó mediante un decreto emitido el 6 de septiembre y publicado en el Boletín Oficial Nº 28.189 de este jueves deberá dejar su cargo.

La medida fue adoptada tras la finalización de un sumario administrativo del profesional, y donde se comprobó que incurrió en las causales de “Toxicomanía” y “Negligencia manifiesta” en el ejercicio de sus funciones.

Hospital Gualeguaychú
Hospital Gualeguaychú

Además se aclara que: “El proceso disciplinario se inició luego de varias denuncias y hechos que pusieron en riesgo a pacientes y colegas, siendo determinante el hecho ocurrido en julio de 2022, cuando San Miguel fue reincorporado por orden judicial tras un despido anterior.

Según el sumario, el médico se presentó al hospital en un “estado de excitación, vociferando y mostrando un arma”, lo que generó alarma entre sus compañeros.

Al respecto, el residente Kevin Monti Benedetti declaró que San Miguel lo saludó en un estado de “exaltación verborrágico, inquieto” y lo invitó a palpar su bolsillo, donde se notaba “algo sólido”, mientras que el oficial ayudante Pablo Emanuel Pérez, informó que el médico exhibió una pistola de aire comprimido calibre 4.5, descargada.

En tanto, el cirujano Mauro Etchecopar relató que esa noche el profesional “estaba un poco excitado, tuvo como un brote psicótico”. La investigación también recogió testimonios sobre el presunto consumo problemático de sustancias por parte del médico.

Claudia Margarita Figueroa (obstetra) declaró que: “Este médico en ese estado de consumo es un peligro, primero para los pacientes, los bebés, las madres, porque es médico Obstetra”.

Uno de los puntos más graves fue el uso indebido del fórceps en partos. Figueroa aseguró que el médico lo aplicaba en un plano incorrecto, “provocando daños cerebrales irreversibles en el bebé”, al punto de que el personal decidió ocultar el instrumento para evitar nuevos riesgos.

El director del Hospital, Eduardo Elías, confirmó las quejas recibidas de pacientes y colegas, incluyendo el caso de un recién nacido que debió ingresar a terapia intensiva neonatal tras una decisión médica del sumariado. “Un profesional de estas características no debe trabajar como médico, ni en un hospital, ni operar mucho menos”, concluyó.

Consecuencias administrativas y legales

Aunque las actuaciones penales fueron archivadas al no configurarse delitos tipificados, el sumario determinó que San Miguel incurrió en causales de cesantía previstas en la Ley 9892, artículos 46º incisos a) “Toxicomanía” y d) “Negligencia manifiesta, omisión reiterada o faltas graves en el desempeño de sus funciones”.

Además, el Ministerio de Salud de Entre Ríos inició gestiones para retirar su matrícula profesional, con el fin de impedir que pueda volver a ejercer en la provincia. (Con información de APF Digital)