El joven vive en el barrio Elena, de Eldorado, y fue el ganador N° 55 del programa IPLyC Inclusivo, quien relató que tuvo que dejar el curso de Seguridad e Higiene debido al costo de las cuotas, pero aseguró que este premio le permitirá retomar sus estudios.
“Con este premio veré si puedo retomar mis estudios, porque con el dinero que recibo de la pensión también ayudo a mi mamá”, indicó Carlos Roberto Cáceres, de 22 años, quien de niño sufrió parálisis cerebral y perdió el equilibrio en las piernas por lo que debe movilizarse con muletas. Sin embargo, este joven continuó estudiando y terminó sus estudios primarios y secundarios, y continúa con sus planes de seguir formándose.
“Cuando me llamaron desde el IPLyC SE para avisarme que salí sorteado, no creí que era verdad, hasta que llegaron ustedes. Es que nunca había visto el programa. Estoy muy contento. Estaba junto a mi hermano mellizo, que me felicitó de inmediato”, manifestó Carlos.
Agregó además que “no sabía qué hacer con el cheque de 60 mil pesos, porque quiero invertirlo bien, y no quería ilusionarme porque no sabía si era cierto. Pero pensándolo bien lo voy a utilizar para continuar mis estudios porque me gustaría tener un oficio y un sueldo fijo, no quiero depender sólo de mi salario”.
“En la vida todo se puede”, expresó Cáceres quien dedica buena parte del día al campo, donde tiene su propio caballo. “Puedo montarlo a pesar de mi dificultad. De chiquito me gustan los animales, cuando era niño comencé a cuidar a uno, y hace 14 años que tengo el mío. Los animales sienten el cariño, apenas llego al campo ellos me rodean”.
El joven beneficiario vive con su madre y sus dos hermanos, envió palabras de esperanza a los poseedores del Certificado Único de Discapacidad (CUD) porque “pueden salir sorteados en cualquier momento. Yo nunca gané nada y ahora me encontré con esta sorpresa, aunque no estaba muy seguro al principio. Este premio está muy bueno, te re ayuda”.
En su mensaje a la sociedad, pidió que “respeten las rampas, que tengan empatía y no estacionen los vehículos en los espacios delimitados para los discapacitados”.
Fuente: Norte Misionero