Franco Armani siempre rinde en Copa Libertadores. Esta noche ante Fortaleza, fue la figura de River y del partido. Gracias a él, el conjunto dirigido por Marcelo Gallardo, se trajo un empate de Brasil.
El arquero argentino tuvo cinco atajadas determinantes. Una mejor que la otra. Solo fue abatido por Silvio Romero en el primer tiempo. No tuvo responsabilidad alguna en ese gol. El capitán del Millonario sostuvo a su equipo cuando no la pasaba bien en el Arena Castelão. Le remataron cinco veces al arco y tapó todas. Una actuación digna de arquero de selección.
La mejor ocurrió a los 36 minutos del primer tiempo. Lucas Lima enganchó por la derecha y remató al segundo palo. Armani voló y a mano cambiada alcanzó a desviar una pelota que parecía imposible de alcanzar. Envió la pelota al córner y se ganó las felicitaciones de sus compañeros.