Peng Shuai sigue sin aparecer públicamente. En las últimas horas salió un comunicado que aseguran que sería de su autoría pero la WTA exige mayor claridad para conocer el estado de la tenista.
El 2 de noviembre sucedió el último acto de Peng con su firma. Denunció públicamente por abuso sexual a Zhang Gaoli, ex vicepresidente del régimen chino. Desde entonces no había información suya.
La China Global Television Network, medio prestigioso local, emitió un comunicado que sería de la atleta. “No estoy desaparecida ni estoy en peligro. Solo estuve descansando en casa y todo está bien”, habría escrito.
El dudoso texto surgió tras un mail que le llegó a Steve Simon, presidente de la WTA. Hubo muchas lagunas que el directivo no creyó y por lo tanto, solicitó mayores pruebas.
El mensaje que habría enviado Peng Shuai
“Hola a todos, soy Peng Shuai.
Con respecto a las noticias recientes publicadas en el sitio web oficial de la WTA, el contenido no ha sido confirmado ni verificado por mí misma y fue publicado sin mi consentimiento. La noticia en ese comunicado, incluida la acusación de agresión sexual, no es cierta. No estoy desaparecida ni estoy en peligro. Solo estuve descansando en casa y todo está bien. Gracias de nuevo por preocuparse por mí. Si la WTA publica más noticias sobre mí, verifíquelas conmigo y publíquelas con mi consentimiento.
Como tenista profesional, les agradezco a todos por su compañía y consideración. Espero promover el tenis chino con todos ustedes si tengo la oportunidad en el futuro. Espero que el tenis chino sea cada vez mejor.
Una vez más, gracias por su consideración”.
La respuesta de la WTA
“La declaración publicada hoy por los medios estatales chinos sobre Peng Shuai solo plantea mis preocupaciones en cuanto a su seguridad y paradero.
Me cuesta creer que Peng Shuai en realidad escribió el correo electrónico que recibimos o crea lo que se le atribuye. Peng Shuai mostró un valor increíble al describir una acusación de agresión sexual contra un ex alto funcionario del gobierno chino. La WTA y el resto del mundo necesitan pruebas independientes y verificables de que está a salvo.
En repetidas ocasiones he intentado comunicarme con ella a través de numerosas formas de comunicación, sin éxito. Peng Shuai debe poder hablar libremente, sin coacción o intimidación de ninguna fuente. Su denuncia de agresión sexual debe ser respetada, investigada con total transparencia y sin censura.
Las voces de las mujeres deben ser escuchadas y respetadas, no censuradas ni impuestas“.