Luego de las lluvias registradas desde el mediodía del jueves y el diluvio que siguió horas después en Corrientes, los incendios forestales se redujeron en un 70 por ciento y solo quedan activos cuatro focos, según informó el Comando de Operaciones de Emergencias (COE).
En total, las llamas quemaron 934.238 hectáreas, estimó el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en el último informe de la Estación Experimental, lo que equivale a casi el 11 por ciento del territorio provincial. Las zonas que mantienen focos activos se centran en las áreas de Palmar Grande, Loma Linda, Paraje Zapallo, y en la tercera y cuarta sección de la localidad de San Miguel, indicó el subdirector de Defensa Civil, Bruno Lovinson.
“Estamos con un control de focos ígneos por encima del 70 por ciento”, garantizó el funcionario. Y destacó también que “las lluvias permitieron mover las brigadas junto a los equipos de los bomberos voluntarios a sus zonas”. Además se mostró optimista frente al cuadro de situación al estimar que “en 24 o 48 horas se podrá contar con el control total de los incendios” ya que “está mucho mejor que hace unos días”.
El informe del INTA precisó que el departamento más afectado es “Ituzaingó, con más de 173 mil hectáreas quemadas”. En segundo lugar, está Santo Tomé donde 108 mil hectáreas fueron tomadas por el fuego.
Este viernes, el presidente Alberto Fernández sobrevoló la zona afectada por los incendios junto al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés.
El mandatario provincial aseguró en declaraciones radiales parte de las negociaciones que llevó a cabo con el Presidente: “No hablamos de un subsidio de tasas. Hablamos de plata que reciban los productores para poder salir adelante. Necesitamos que el Gobierno Nacional ponga $500 millones y esos $500 millones vayan directamente a los productores sin tasas”.