En las últimas horas, la Justicia investiga un supuesto femicidio seguido de un suicidio, un hecho que conmocionó a Villa del Rosario. Según el Ministerio de Desarrollo Social, “nada hacía pensar este desenlace”.
Ocurrió el miércoles a las 21.30 en una casa ubicada en barrio Norte de esa ciudad, cuando Jessica Gómez y Ramón Villafañe fueron encontrados muertos. Las primeras hipótesis serían que el hombre habría matado a la mujer y luego se suicidó.
QUÉ DIJERON LOS VECINOS Y EL PAPÁ DE LA MUJER
Según relataron los vecinos del sector a El Doce, los fallecidos habían mantenido una relación sentimental pero actualmente se encontraban separados. Por su parte, el padre de la víctima, afirmó que los veía bien como pareja y que nunca se hubiese imaginado el terrible desenlace.
Según informó el medio mencionado, el caso quedó a cargo de la fiscalía de Río Segundo, pero el fiscal de Villa del Rosario está al mando de la investigación. En ese marco, ordenaron las pericias correspondientes a través de la Policía Judicial para determinar cómo sucedió el trágico episodio.
QUÉ DIJERON DESDE EL MINISTERIO DE DESARROLLO SOCIAL
La secretaria de Desarrollo Social de la Municipalidad de Villa del Rosario, Ana María Valiente, afirmó que Ramón Villafañe no tenía antecedentes violentos y tampoco había registros de denuncias por parte de su pareja.
Según explicó Valiente, Jessica tenía que recibir la visita de Desarrollo Social este jueves o viernes, pero no tenía que ver con su pareja, sino con un familiar. “Era una familia que habíamos intervenido no hace mucho tiempo por una situación externa a la pareja y que nada hacía pensar este desenlace”, sostuvo la mujer.
“No tenemos registros de ningún hecho de violencia familiar, no había medidas de ningún tipo contra Villafañe. Estamos tan sorprendidos como los vecinos”, expresó. Por lo que se conoció, el supuesto homicida era una persona muy trabajadora y en el barrio lo querían.
Jessica pertenecía a una familia ensamblada y, según comentó Valiente, vivió situaciones difíciles ante sus hermanos. “En esta pareja no podíamos advertir ningún indicio para que esto suceda de esta manera”, concluyó la secretaria.