Benjamín Gamond, el joven atacado a machetazos en México, falleció este lunes y los familiares decidieron donar sus órganos. Así lo confirmó su hermano Marcos, quien reveló que ese fue el último deseo de la víctima.
El titular del Ente Coordinador de Ablación e Implante de Córdoba, Marcial Angós, contó a El Doce sobre cómo es el proceso de donación de órganos y quiénes serían potenciales donantes.
EN QUÉ CASOS UNA PERSONA PUEDE SER DONANTE
A pesar de que muchas veces es un trámite burocrático, Angós informó que sólo se puede donar órganos bajo la condición de muerte cerebral, muerte encefálica o muerte bajo criterios neurológicos, como es en el caso de los daños irreversibles.
Por su lado, afirmó que Gamond podrá ser donante en México. “Los órganos quedan en el lugar donde está el donador y se distribuyen entre los receptores de esa zona”, explicó Angós.
En nuestro país, existe desde el 2019, la Ley 27.447, más conocida como Ley Justina, afirma: “toda persona mayor de 18 años es donante de órganos o tejidos, salvo que haya dejado constancia expresa de lo contrario”.
El proyecto tuvo lugar como homenaje a Justina Lo Cane, la chica de 12 años que falleció el 22 de noviembre de 2017 a la espera de un corazón. El 26 de julio de 2018 su nombre se convirtió en justicia para miles de personas que ahora podrán recibir una donación.
EL ÚLTIMO DESEO DE BENJAMÍN GAMOND
En diálogo con TN, el hermano de la víctima reveló su último deseo: “Era su voluntad y la de nuestra familia”, y agregó: “Esperemos que termine para todos nosotros lo más pronto que se pueda porque es muy doloroso”. Hasta el momento, esperan la autorización correspondiente y por eso pidió celeridad a las autoridades correspondientes.
“Va a dejar su corazón en México. Pedimos autorización a los gobiernos para que nos ayuden a agilizar el proceso de repatriar a mi hermano a la Argentina y que no caigamos en la burocracia habitual de la Justicia”, expresó el familiar entre lágrimas.
Finalmente, este martes, tanto los familiares como los médicos presentes en el hospital lo despidieron como a un héroe, de pie y con un emotivo aplauso entre los pasillos del nosocomio donde se encontraba el joven desde el día del ataque.