Nicolás Sebastián Murúa abusó sexualmente de su hija, por tres años y fue preso tras la denuncia. Este jueves, la Justicia lo condenó a 15 años de prisión luego de amenazarla por redes sociales y hacerle vivir un infierno.
“Es un alivio, no me imaginaba llegar hasta acá. Hace más de cinco años que vengo peleando, no me salen las palabras”, contó Farías en diálogo con ElDoce previo al falló. El mayor de edad estaba acusado de abusarla desde los 13 hasta los 16 años.
La víctima le contó a su madre en ese momento lo que vivió y ambas radicaron la denuncia. En 2019, hicieron lo mismo en el Polo de la Mujer. Sin embargo, la investigación no avanzó hasta el 2021 cuando recibió amenazas de muerte por parte de su progenitor.
Es que, el hombre le siguió enviando mensajes por Facebook, dejó notas anónimas en su casa y fue a la cárcel. Pero el hostigamiento no paró: “Soy el primer hombre que te probó en la vida. Pronto se te acabará la felicidad, hija”; “Ya van a ver de lo que soy capaz. Las voy a matar, total no tengo nada que perder. Pronto se van a acordar de mi”; “Q.E.P.D hija”, redactó el sujeto en algunos escritos para su hija.
La condena al padre que abuso de su hija durante tres años
El malviviente fue hallado culpable de los delitos de abuso sexual agravado por situación convivencia y abuso sexual con acceso carnal agravado por convivencia preexistente, el uso de armas y el daño en la salud mental de la víctima.
De esta manera, la Justicia puso fin al calvario de la joven el jueves 2 de febrero de 2023, mediante un juicio abreviado, ya que el acusado reconoció todos los cargos de los que se lo acusaba.