El fiscal Rubén Caro confirmó que el arma que mató al policía Franco Ferraro, durante el golpe comando que dejó tres muertos en Nueva Córdoba, el 16 de febrero, no pertenece a la Policía de Córdoba.
"Es una bersa glock 9mm que habría usado el ladrón abatido Ricardo Serravalle, por lo tanto se corrobora que no forma parte de las 72 robadas en 2015 ya que éstas son bersa 9mm", dijo en Cadena3 el fiscal, en base a los resultados de las pericias de la Policía Judicial.
De este modo, quedó descartado que Ferraro haya sido asesinado con una de las armas policiales, algo que era comentado entre las filas policiales ante la posibilidad de que uno de los uniformados haya muerto por culpa de la corrupción interna.
El arma que mató a Ferraro no apareció hasta el momento, y el fiscal dijo que se sigue investigando quién se la llevo de Rondeau y Buenos Aires, la escena del crimen.
En el lugar sí se secuestró un arma robada a la Policía, pero no es la que mató a Ferraro.
El feroz golpe comando dejó tres muertos (un policía y dos delincuentes), varios policías heridos, tres detenidos (uno de ellos, una mujer con prisión domiciliaria) y dos prófugos.
