Dos casos positivos de rabia en animales que viven cerca del basural de Capilla del Monte y el río Pinto, volvieron a encender las alarmas en Punilla.
Semanas atrás, se había confirmado que un burro murió en la localidad de San Esteban contagiado por la enfermedad que transportan los murciélagos.
En esta oportunidad, los animales fueron controlados por veterinarios del Senasa que trabajan en la región para evitar un nuevo brote.
También se trabaja en la zona de la Pampa de Olaen y en la Pampa de Achala.
En tanto, en la zona de Traslasierra también se intensifican los controles luego que se detectara que un murciélago con rabia habitaba en los techos del hospital regional de Villa Dolores.