Por Alejo Gómez.
La información circuló rápido y llegó a los pueblos vecinos. En Leones, el pueblo gringo del sureste de la provincia de Córdoba, un empresario del transporte alardeaba con tener 1 millón de pesos para una transacción comercial. Era mucho dinero circulando en un ambiente que en algunos casos suele quedar bajo la lupa de la Justicia, en particular todo aquello relacionado con las autopartes.
Según la investigación, el dato llegó al hijo de un reconocido transportista de Marcos Juárez que contactó a una banda de "pesados" en Pilar, provincia de Buenos Aires, y entre todos prepararon un golpe comando en la casa del empresario de Leones.
Ese golpe comando fue en la madrugada del 31 de octubre del 2016. El empresario Javier Francucci (49) dormía con su entonces pareja, María Gabriela Oliveto (52), cuando pistoleros armados los despertaron y bajo amenazas exigieron el millón de pesos.
"Vos sabés lo que venimos a buscar", le dijeron los asaltantes al empresario camionero. Como no lo consiguieron, se llevaron a la mujer en camisón, la metieron en un auto y desaparecieron, con la promesa de hacerle daño si no entregaba el millón. Empezó de este modo un secuestro que fue noticia nacional y que duró apenas unas horas, porque Oliveto fue liberada en perfecto estado en Pilar.
La banda, al verse acorralada, decidió soltarla y escapar. Habían ido por la plata, no por un secuestro, y no tenían la lógistica necesaria para mantener a alguien cautivo.
Todo lo narrado arriba es la principal hipótesis de los investigadores sobre cómo se gestó el robo en la casa de Francucci que derivó en el secuestro de su pareja.
Después de un año de rastrear información en un caso complejo, la Brigada Antisecuestros de la Policía de Córdoba, en colaboración con el Eter y Antisecuestros de Capital Federal, arrestó este 14 de noviembre a cuatro hombres, tres en la zona de Pilar y un cuarto en Marcos Juárez (el hijo del reconocido transportista).
Un quinto involucrado, también de Marcos Juárez, no estaba en su domicilio cuando allanaron. Tiene pedido de captura, aunque sería como partícipe secundario. Los demás involucrados serán trasladados entre mañana y el jueves a Bell Ville, donde quedarán imputados por presunto "secuestro extorsivo" por el fiscal Federal José María Uriarte.
En los procedimientos se secuestraron celulares y dos pistolas calibre 9 milímetros.
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Ambiente turbio. Gabriela Oliveto y Javier Francucci se separaron al tiempo del secuestro. Actualmente, Francucci, quien en ocasiones anteriores tuvo problemas con la Justicia, está preso en Buenos Aires: un juez de Lomas de Zamora ordenó hace un mes su arresto y lo imputó por presuntamente estar vinculado con una banda que robaba camiones en la zona sur del conurbano para luego ocultarlos y venderlos en la provincia de Córdoba.
Dos empresarios, un policía bonaerense y otros nueve sospechosos fueron los detenidos semanas atrás por la Justicia de Lomas de Zamora. Además de Francucci (dueño de la empresa de reparación de camiones "Servicio Mecánico Diesel SRL") cayó en Córdoba capital el transportista Nicolás Nogueira (44).
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Según la investigación inicial, los empresarios Francucci y Nogueira están acusados de recibir los camiones para desmantelarlos, a sabiendas de que eran robados.
De todas maneras, el secuestro de Oliveto no está vinculado con la causa que tiene a Francucci tras las rejas. "Personalmente me contacté con el juez de Lomas de Zamora para seguir la causa, pero no tiene nexo con la investigación que hicimos en Córdoba", explicó a Día a Día el fiscal Federal de Bell Ville Uriarte.
"Francucci no tiene participación en el secuestro de Oliveto", agregó, ante la sospecha que corrió en un primer momento sobre que el secuestro podría haber sido un presunto "ajuste de cuentas" contra el empresario.
Uriarte confirmó los arrestos y aclaró que uno de los tres detenidos en la provincia de Buenos Aires ya se encontraba preso por otra causa por robos.
El fiscal Federal destacó la investigación policial y se mostró cauto de dar precisiones hasta tanto los acusados sean llevados a Bell Ville y notificados de la imputación.
Algo del momento. "Los delincuentes exigían un millón de pesos. Para conseguirlos, decidieron llevarse a la mujer. Fue algo del momento. Al parecer no habían ido con la intención de secuestrarla", apuntó el comisario inspector Juan Díaz, a cargo de Delitos Complejos.
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"Se trata de una banda que 'trabaja' en Córdoba y en Buenos Aires. Son 'pesados', todos tienen antecedentes por robos calificados", añadió.
La Policía cree que cometieron un error al secuestrar a la mujer, y por eso la liberaron a las pocas horas. En ese lapso, Oliveto fue trasladada en un vehículo a Buenos Aires y retenida en una casa en Pilar. "No eran malas personas", dijo la víctima poco después de ser liberada.
Fuentes con acceso al expediente confiaron a este diario que el hombre detenido en Marcos Juárez, identificado como Alan González (23), es hijo de un empresario del transporte (actualmente, dueño de un taller mecánico) que habría trabajado con Francucci.
"Se filtró la información de que Francucci tenía esa plata, y allá fueron a buscarla", resaltaron. "Había mucha guita en juego. La banda se vino desde el conurbano exclusivamente para eso. Para 'apretar' a Francucchi decidieron secuestrar a la mujer", confiaron otros avezados investigadores.
Esta madrugada, el Eter irrumpió en una casa de calle San Juan al 1.200, en Marcos Juárez, y arrestó a González. Al mismo tiempo cayeron los presuntos cómplices en Pilar, Buenos Aires.
"Fue un asalto al azar", supo decir en su momento Francucci a la prensa. Ahora quedó demostrado que no fue así.
