Por Julio Moya
La situación es muy rara para un jugador como Ivo Cháves. El salteño, que pertenece a Talleres y que está a préstamo en San Martín de Tucumán vive un extraño momento personal que afecta a su salud, más a su condición física y que lo tiene a mal traer. Cháves ha sido uno de los valores más "ejemplares" del plantel de la T, cuidando al detalle su cuerpo y dedicado a lo que más le gusta: jugar a la pelota. Pero ya hace un tiempo se encontró con inesperados síntomas que lo marginaron del plantel del equipo tucumano y que derivó en estudios médicos, consultas y análisis de todo tipo. "Me sentía con un cansancio difícil de explicar. Volvía de los entrenamientos y pasaba a la cama. Yo pensaba que era desgaste, pero después empecé a darme cuenta que era algo importante", contó el lateral-volante a Día a Día.
"Es como cuando te estás por engripar feo, ¿entendés? todo ese malestar físico lo venía sintiendo después de los entrenamientos", contó con más claridad.
Lo concreto que Cháves comenzó a vivir una odisea de médicos y estudios. Si no fuera futbolista quizás hasta podría convivir con el problema porque la exigencia física es diferente. "Aclaro porque recibí muchos mensajes de amigos y conocidos: yo ahora hablando con vos me siento fenómeno, hago una vida más que normal. Pero el cuerpo lo siente cuando hay una exigencia profesional", resaltó.
–¿Y cómo estás ahora, qué te dijeron los médicos?
–No es fácil este tema, me tienen que evaluar bien y llevar adelante un plan de recuperación. Aparentemente no pasa sólo por tomar algún medicamento, sino por un tratamiento general. Por suerte Talleres se portó diez puntos y están al tanto de todo eso con absoluta predisposición de toda la institución.
–¿Y cómo era el problema? ¿qué sentías?
–Llegué a un punto en que la estaba pasando mal. Cada práctica era dolor en las piernas y un malestar físico general que no me permitía entrenar en condiciones normales. Tuve que parar y me hice análisis y los resultados arrojaron una desrregulación hormonal.
Ése es el diagnóstico inicial que le dieron a Ivo Cháves, después de los primeros análisis y de allí viajó a Buenos Aires en busca de otras opiniones y más especialistas. "Hablé en el club (San Martín) de este problema y me hicieron hacer nuevos análisis y dieron mal otra vez. Antes de sumarme a San Martín me sentía muy bien, había hecho la pretemporada con Talleres. Pero San Martín me pidió unos estudios en Buenos Aires", expresó.
–¿Y cómo seguiste con los análisis?
–Me diagnosticaron un síndrome de fatiga crónica. Y ahora estoy viendo cómo son los valores hormonales, glóbulos, testosterona, está claro que es una situación ilógica basada en un desfasaje hormonal. Lógicamente esto requerirá de un tratamiento especial y aún no está determinado cómo será.
Cháves, igual quiere aclarar algo ante la lluvia de mensajes que le llegaron a su teléfono celular. "Te lo explico mejor: yo sin entrenar tengo una vida normal y no siento malestar de ningún tipo. Pero a la hora de hacerlo en alta competencia me apareció esta situación que me preocupó", completó.
La nutricionista de Talleres supo decir que Cháves era muy "riguroso" con las comidas, la calidad y tipo de alimentos y el control diario de su peso. Nada hacía pensar que le sucedería algo como lo que está viviendo.
"Yo estoy abocado a recuperarme, a ver qué sucede con mi situación en San Martín. Es un conjunto de síntomas, pero estoy pensando en recuperarme, sólo estoy haciendo un trabajo de gimnasio. Y quiero salir de esto para poder volver a jugar a la pelota", completó.
Situación definitoria: ¿vuelve a Talleres?
Ivo Cháves llegó como refuerzo a San Martín de Tucumán, pero en el club no lo pueden utilizar como tal y su recuperación y estabilidad no será de un día para el otro. No es descabellado que la dirigencia tucumana prescinda de sus servicios y el jugador regrese a Córdoba para intensificar su recuperación: "Ya he hablado con Andrés (Fassi) y otros dirigentes, como con los médicos y están más que a mi entera disposición y estoy muy agradecido. Veremos como se resuelve todo en los próximos días".
