Casi medio millón de personas (490 mil) están bajo la línea de pobreza en el Gran Córdoba según datos relevados por el Gobierno de la Provincia, en la primera difusión del Monitoreo de Condiciones de Vida en el que se evaluó, no sólo el nivel de ingresos, sino también el impacto de los programas sociales no monetarios.
Ese universo representa al 30,3 por ciento de la población, incluyendo en ese porcentaje a quienes están por debajo de la línea de indigencia: unas 100.000 personas.
Estos datos difieren en 10 puntos de las cifras difundidas por el Indec para el Gran Córdoba en marzo pasado, cuando el índice de pobreza alcanzaba al 40,5 por ciento de la población local (de acuerdo con la medición nacional), número que despertó la polémica entre Córdoba y la Nación.
Consultado por la diferencia con los números del Indec, Héctor Conti, director de Estadísticas y Censos de la Provincia, dijo que esos porcentajes sólo podrán compararse con los datos actualizados que la Nación tiene previsto difundir el próximo jueves.
No monetarios. La novedad del estudio provincial es que, además de medir el nivel de ingresos con un cuestionario similar al de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), también se relevó el impacto de 11 programas sociales no monetarios.
Conti explicó que tomando en cuenta el impacto de los programas alimentarios, de transporte y tarifa social, se reduce en 13 mil personas la cantidad de pobres, y en 40 mil la cantidad de personas bajo la línea de indigencia.
Fueron considerados para el Monitoreo de Condiciones de Vida los planes alimentarios Paicor, Más Leche, Alimento para Celíacos, Comedores (copa de leche), y Comedores Adultos Mayores. Asimismo, se tomaron los programas Boleto Estudiantil, Obrero y Adulto Mayor. Y las tarifas sociales en Energía Eléctrica, Agua Potable e Impuesto Inmobiliario.
De las personas que están por debajo de la línea de pobreza, el 85 por ciento es beneficiaria de algún plan social brindado por la Provincia, mientras que entre las personas indigentes esa proporción asciende al 94 por ciento.
Indigentes. El dato de indigencia sin el impacto de los planes sociales es del 6,2 por ciento en Gran Córdoba. Pero tomando en cuenta la ayuda estatal, ese porcentaje se reduce al 3,8 por ciento. Mientras tanto, la cifra de pobres pasa del 30,3 al 29,6 por ciento.
La metodología, elaborada en conjunto con la Universidad Nacional de Córdoba, realizó una valorización monetaria de aquellos planes que no tienen su equivalente directo en dinero, para evaluar así su impacto sobre la economía de las personas. Silvina Rivero, secretaria general de la Gobernación, valoró que con esta metodología se puede medir, también, la eficiencia del Estado en la gestión de programas sociales, y con ello profundizar la eficacia de los mismos.