El crimen de la maestra particular de 51 años en barrio Santa Bárbara, colindante a Ciudad Evita, conmocionó a la barriada, ya que Ana Carrillo era muy apreciada por los vecinos.
Daba clases particulares y por la situación económica, hacía changas junto a su marido para subsistir con la familia, integrada por tres hijos. Por ejemplo, juntar cartones.
"Le robaron la mochila y un celular que no vale dos pesos. Era un celular viejo, táctil, pero no tenía internet. Para lo único que le servía era para hacer la tarea del colegio con los chicos. No tenía plata, no tenía nada", describió con amargura Enrique Márquez, su esposo.
"La han asaltado, le quitaron la mochila y el celular. La han degollado. Ella no trabajaba en ninguna escuela, era una maestra particular que se ganaba la vida yendo casa por casa", añadió en Radio Mitre Córdoba.
"Ella pasaba por ese callejón para ir a la escuela, todos los días pasaba por ahí para acortar camino", mencionó y añadió que, por falta de dinero, "también salíamos a juntar cartones".
Su cuerpo fue localizado por vecinos en un descampado detrás de la Escuela Granadero Márquez, en Camino Santa Bárbara a la altura del kilómetro tres y medio. Investigadores creen que la mujer habría reconocido al asesino y por eso fue ultimada.
