En plena cuarentena por coronavirus, el bar Gold Star de Las Varillas realizó shows en vivo con el local colmado, durante cinco fines de semana.
La Justicia imputó a Cristian Reynoso, cantante de cuarteto que dio el espectáculo en vivo, y al propietario del local, por infringir las medidas sanitarias decretadas a nivel nacional.
Es por la realización de un evento masivo en el que no se respetó la distancia social, ya que en las mesas había más personas de las que se permiten; y no se tomó la fiebre ni le hicieron firmar una declaración jurada con sus datos personales a los asistentes, tal como exige el Ministerio de Salud.
En base al artículo 205 del Código Penal, les podría caber una pena de prisión de seis meses a dos años, por "violar las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia".
En diálogo con El Doce, el cantante hizo su descargo y señaló que tenían permiso de la Municipalidad: "Me dijeron que estaba habilitado a cantar y me confié. Si sabía que había un gris no lo hacía. Vivo de la gente, me dedico a cantar", explicó.
