Una serie de allanamientos llevados adelante por el Departamento de Sustracción de Automotores terminaron con un impresionante secuestro de autopartes en la ciudad de Córdoba, más específicamente en galpones de barrio San Vicente, Ferrer y Juniors.
Lo llamativo de todo esto es que solamente quedó detenida una sola persona, puesta a disposición de la Justicia. A su vez, se registra la clausura y el secuestro de 30 vehículos, indicaron desde la Policía.
"Se han visto gran cantidad de automóviles los cuales luego de su desarme, sus piezas son puestas a la venta mediante redes o en distribuidoras de talleres. Hay una gran cantidad de autopartes, ninguna cuenta con autorización para ser comercializadas. Se trataría de una banda dedicada a la comercialización", indicó el comisario inspector, Diego Martinelli, jefe de delitos económicos.
Lo que más llamó la atención es la cantidad de autopartes y su clasificación. Sobre esto, Martinelli aseguró: "El año pasado el departamento de sustracción de automotores hizo un operativo similar. Pero en este caso se nota la gran prolijidad con la que trabajaban".
Y agregó: "Estamos tratando de establecer dónde eran insertados estos repuestos. La ley nos dice que todas las autopartes autorizadas tienen que tener un sticker, pero muchas veces puede pasar que nos ofrezcan repuestos mas baratos y sean productos de estos ilícitos".
Por último explicó cómo continuará el procedimiento. "Primero se tiene que hacer un inventario de todo esto, lo que va a llevar un tiempo, meses. Después son desmontados y fundidos".