Un hombre comenzará a ser juzgado este lunes en los tribunales de la capital cordobesa como único imputado del femicidio de su novia Ingrid Vidosa, cuyo cadáver fue encontrado en agosto de 2015 en un sendero del Cerro de la Cruz, en Villa Carlos Paz, informaron fuentes judiciales.
El debate oral estará a cargo de la Cámara Séptima del Crimen de Córdoba, que fijó el inicio del mismo para el 7 de agosto, y contará con jurados populares.
En el banquillo de los acusados estará el novio de Vidosa (25), Marcos Haye (33), quien está procesado por el delito de "homicidio calificado por el vínculo, alevosía y por mediar violencia de género".
Por su parte, Carlos Vidosa, padre de la víctima, explicó que Haye llegará al juicio detenido en el penal de Bower y adelantó que van a pedir que sea condenado a prisión perpetua.
El hecho que se ventilará en el debate fue descubierto el 25 de agosto de 2015, cuando el cadáver de Vidosa fue encontrado en el sendero que lleva a la cima del Cerro de la Cruz.
De acuerdo a la investigación de la fiscal 3 de Villa Carlos Paz, Jorgelina Gómez, Haye condujo a su novia hasta la estación 2 del Vía Crucis donde "extrajo un arma de fuego calibre 22 y le disparó en la región craneal posterior".
"Luego empujó el cuerpo de Ingrid por un barranco profundo y rocoso para finalmente darse a la fuga", explicó a la prensa Carlos Nayi, abogado querellante.
Según el testimonio de los familiares de la joven asesinada, ésta había salido de la casa de su madre, en Villa Carlos Paz, el 24 de agosto con la idea de ir a una entrevista de trabajo. Para ello, la joven dejó a su hija de 6 años -fruto de una relación anterior a la de Haye- al cuidado de su abuela, quien, al advertir que Vidosa no regresaba con el correr de las horas llamó a la Policía.
Al mediodía siguiente, un grupo de turistas que subían por el sendero del Cerro de la Cruz hallaron el cuerpo de la joven madre, a raíz de lo cual, dicho paseo fue cerrado por orden de la Justicia hasta diciembre de aquel año.
Entre las pruebas recolectadas en el lugar del hecho se encuentra una pistola calibre .22 que tenía un proyectil en la recámara y cuyas características coincidieron con el que se halló en el cuerpo de Vidosa.
Mientras que en la casa de Haye, en Tanti, se encontró una caja con balas idénticas y el faltante de dos proyectiles. La fiscal Gómez, quien pidió la elevación a juicio de la causa a mediados de 2016, remarcó que la presencia de Haye en la escena del crimen quedó probada mediante las imágenes de la cámara de seguridad que funcionan en distintos puntos del sendero del cerro donde se lo vio junto a la víctima momentos previos a cometido el crimen.
Por otro parte, los padres de Vidosa mantienen desde entonces una lucha por conseguir la guarda de su nieta.
"Es lo que nos mantiene vivo después de las desgracias que nos vienen pasando. La niña está con nosotros, va a la escuela, le va muy bien, es muy madura y sabe todo lo que pasó", relató Vidosa padre.
El crimen de esta joven madre fue el tercero descubierto en 2015 en el Cerro de la Cruz luego de que el 13 de marzo de ese mismo año se hallaron allí los cadáveres de Andrea Castana (34) y del fotógrafo Hernán Sánchez (32), asesinados en dos hechos distintos.
Las fuentes judiciales detallaron que la mujer fue hallada debajo de unas piedras en la estación 9 y 10 del cerro, y la autopsia reveló que había muerto por "asfixia por ahorcamiento".
Castana, madre de dos niños, había sido vista con vida por última vez el 11 de marzo, cuando ascendió al cerro para realizar actividad física y nunca regresó; al tiempo que por su crimen fueron detenidos posteriormente su ex marido, Juan Manuel Lazzaroni; un amigo de éste, Diego Luján; y Fernando Villa.
En tanto, el fotógrafo Sánchez estaba desaparecido desde diciembre de 2014 y su cuerpo fue encontrado en un sector del cerro de la Cruz que está ubicado a unos 200 metros de calle La Rioja de Villa Carlos Paz.
Los médicos forenses establecieron que el cadáver del hombre presentaba un avanzado estado de descomposición coincidente con la fecha en que desapareció.
Ambos crímenes son investigados por el fiscal Carlos Mazzuchi que aquel 13 de marzo de 2015 ordenó un rastrillaje para localizar a Castana y en medio de ese operativo se halló el cuerpo de Sánchez.
Tras confirmarse la identidad del cadáver, la familia del fotógrafo cuestionó la labor del fiscal por considerar que no había actuado como correspondía desde que se hizo cargo de la denuncia por la desaparición.
De hecho, un grupo de legisladores pidió luego el juicio político de Mazzuchi por mal desempeño de sus funciones y negligencia.
