Juzgan a un ingeniero británico que quiso entrar a Córdoba con 11 kilos de éxtasis

El hombre, de 59 años, está en Bouwer desde noviembre pasado. Es un caso extraño: rara vez una "mula" es alguien profesional y con recursos económicos. La droga está valuada en un millón y medio de pesos.

Juzgan a un ingeniero británico que quiso entrar a Córdoba con 11 kilos de éxtasis
La droga secuestrada en el Aeropuerto Taravella\u002E

En el Tribunal Oral Federal 1 de Córdoba juzgarán este miércoles a un hombre de nacionalidad británica, de 59 años, acusado de arribar en noviembre pasado al Aeropuerto Ambrosio Taravella con 11 kilos de pastillas de éxtasis escondidos en un doble fondo de las valijas.

John Merrett, casado, de profesión ingeniero en túneles, fue atrapado el 14 de noviembre de 2016, en ocasión que le descubrieron la droga en el escáner del Aeropuerto, donde acababa de arribar tras el trayecto Ámsterdam-Río de Janeiro-Córdoba.

Se trata de un caso extraño: es usual que las "mulas" (como se llama a quienes transportan droga de un punto a otro) sean personas vulnerables, por lo general sin instrucción ni dinero. También suelen ser jóvenes.

Merrett es un hombre mayor, profesional universitario, y tenía billetes de varios países, una tarjeta de débito, dos de crédito y una reserva en un hotel en pleno Nueva Córdoba.

La droga, 11 kilos de éxtasis (38 mil pastillas), está valuada en un millón y medio de pesos.

El británico será juzgado por presunto "contrabando agravado de estupefacientes en grado de tentativa y en calidad de autor". Afronta una pena de entre 5 y 14 años de prisión.

Según se lee en la causa, aquella madrugada "al momento de realizar el escáner sobre dicho equipaje, del análisis de las imágenes arrojadas por éste, surgieron indicios de que el pasajero podría estar transportando mercadería prohibida. Es por esto que (...) al revisar la estructura de la valija se advirtió un falso fondo de plástico negro, detrás del cual había cuatro bultos envueltos en bolsas plásticas negras".

Merrett quedó detenido, y se dio intervención a la Aduana y la Policía Aeroportuaria. Desde entonces se encuentra en Bouwer.