El intendente Juan Pablo Luque mantuvo una reunión en su despacho con el concejal Marcos Panquilto, uno de los impulsores de la iniciativa para profundizar en la medida preventiva y de cuidado sanitario promulgada para desacelerar la propagación del COVID-19 en la ciudad.
Días atrás la medida alcanzaba solo al transporte público de pasajeros y, a partir de este miércoles, se extiende a todos los ciudadanos que circulen en la vía pública como en espacios físicos cerrados con aglomeración de personas, ya que el uso de tapabocas previene que los pacientes asintomáticos que estén circulando no esparzan el virus, sobre todo en lugares donde el distanciamiento social es difícil de cumplir.
Recomendaciones y restricciones. Según lo que establece la Ordenanza N°15064/20 en su artículo 2, se recomienda a la población, elaborar y utilizar protector de boca, nariz y mentón, barbijo higiénico o mascarilla artesanal siguiendo las instrucciones impartidas por la autoridad sanitaria nacional respecto a su confección con tela y servilleta.
Asimismo, queda restringida la comercialización del barbijo tipo respirador N95, FFP2 o 3, en todas las farmacias, a aquellas personas que no acrediten ser profesional o personal del servicio de salud o a toda persona que no acredite prescripción médica sobre la necesidad de su uso.
Incumplimiento. En cuanto a la obligatoriedad, la ordenanza establece que quedan exceptuados de uso todos los niños menores de 2 años o cualquier persona que tenga afecciones respiratorias o que esté incapacitado para sacarse el cobertor sin ayuda.
Mientras que, el resto de la población que incumpla la normativa, en la vía pública como en lugares físicos cerrados sean, farmacias, bancos, supermercados, estaciones de servicio y demás; cumplida las 72 horas de su promulgación, será sancionado con multas económicas.