Según los investigadores, Alcalá, también quiso matar a la joven. Para ello, la apuñaló con el cuchillo, en la zona izquierda del omóplato. En tanto, con un palo de escoba, la golpeaba en la cabeza.
La hija de la mujer asesinada, logró escapar en dirección a la calle. Allí, pudo dar aviso de la situación, a una vecina. Le manifestó "mi padrastro mató a mi mamá, me apuñaló y me pegó con un palo en la cabeza. Mi mamá está muerta". Este desgarrador relato, es el que también sostuvo ante los empleados policiales, que pasaban por el lugar a bordo de un patrullero.