Este 12 de julio, el Departamento Andalgalá se encuentra celebrando sus 362 años de existencia. Con más de tres siglos de historia, tradiciones y un paisaje privilegiado, conjuga un lugar único y para conocer.
La ciudad está ubicada a 245 kilómetros de la capital catamarqueña. Limita al norte con el Departamento Santa María, al sur con los Departamentos Ambato y Pomán, al oeste con el Departamento Belén y al este con la provincia de Tucumán.
Su historia está íntimamente vinculada a la ocupación aborigen en la provincia. A la llegada de los españoles se concentraban en las tribus calchaquíes como parcialidad de los andalagalas, de allí el topónimo del departamento. Durante el Gran Alzamiento Calchaquí que destruyera tres veces a Londres, se levanta la figura de don Juan Chelemín, bravo cacique de Andalgalá.
Sometidos los aborígenes, en 1658 el General Don Francisco de Nieva y Castilla, fundó el fuerte de San Pedro de Mercado del Valle de los Andalgalas, donde hoy se encuentra la ciudad cabecera, en honor al gobernador del Tucumán don Alonso y Villacorta. De allí deriva el nombre de "El Fuerte de Andalgalá".
Entre los atractivos turísticos se destacan el Museo Arqueológico Lafone Quevedo, el Museo de Sitio Muschaka, el Museo folclórico Municipal Felipe Zurita, la Casa de Samuel Lafonde Quevedo, la Casona de José Pio Cisneros, la Casona de Los Vargas, el Mayorazgo de Huasán, Templo de San Francisco, Mina Santa Rita, Aconquija y el Pucará de Aconquija.
Además, cada año, en el mes de febrero, se realiza la tradicional Fiesta Nacional El Fuerte de Andalgalá, que convoca a miles de catamarqueños y turistas y presenta a artistas de renombre provincial y nacional.