Con pallets que fueron donados por la empresa Dow Argentina, los internos del penal de Villa Floresta, construyeron atriles y pizarras que fueron entregadas a un jardín de infantes de la ciudad de Bahía Blanca.
Se trata del jardín 906 "Martín Miguel de Güemes", que funciona en General Cerri y donde asisten 188 niños.
Al respecto, la directora de la institución, Cintia Ruminof, expresó "en nombre de los chicos, quiero agradecer, de corazón, a la Unidad 4. Realmente necesitábamos los atriles y las pizarras para que nuestros pequeños disfruten y sigan aprendiendo".
Como agradecimiento, la directora entregó un dibujo hecho por los niños a modo de agradecimiento a los reclusos.
Por su parte Luis Velasco, director de la Unidad Penal Nº 4, manifestó que "además de ayudar a quienes lo necesitan, los internos aprenden un oficio que puede serles de gran utilidad para el futuro en libertad. Los internos que forman parte del taller de carpintería del penal trabajaron bajo los valores de cooperación, reciprocidad, beneficio mutuo y solidaridad".
Estas actividades se coordinan desde la Dirección General de Asistencia y Tratamiento y la Subdirección General de Trabajo, desde donde procuran detectar entidades que necesiten mobiliario escolar, juegos didácticos o restauración de sillas de ruedas, y gestionan para dar respuestas desde los talleres que funcionan en las cárceles bonaerenses.