Un delincuente con un serio prontuario policial fue detenido en la madrugada de este miércoles, junto a un cómplice, tras el robo a una cafetería en pleno centro de la ciudad de Bahía Blanca.
Como se vienen registrando los robos últimamente en la ciudad, no es de extrañarse ver "figuritas repetidas" como protagonistas de los delitos.
Ésta vez, se trata de Gabriel Arévalo Loncón de 42 años, quien junto a un acompañante identificado como Martín Elías Peñas de 34 años, asaltaron la caja registradora del local ubicado en la esquina de Colón y la peatonal Drago.
Loncón, conocido por la policía, los medios de la ciudad, al igual que casi todos los bahienses por una famosa fuga ocurrida en marzo del año pasado.
Estando en el calabozo de la Comisaría Primera, Loncón tragó una hoja de afeitar, razón suficiente para que lo trasladaran al Hospital Municipal. Ni lento ni perezoso, aprovechó el momento para ir al baño del cual no salió por la puerta que entró, sino por un ventiluz que le permitió fugarse.
Orgulloso de su "gran hazaña", Loncón se burlaba de la policía a través de las redes sociales mientras permanecía libre pero con orden de captura, hecho que más trade se concretó y volvió a prisión.
Según los acontecimientos, una semana antes de la fuga en el Hospital, el delincuente fue puesto en libertad de la cárcel local, pero fue arrestado por otro delito, en calle Soler 669 donde funcionaba un depósito de una compra-venta.
Otro de los hechos que respaldan el repetido patrón de conducta del delincuente, se registró en octubre del año pasado, cuando fue detenido por robar una florería en Estomba al 200. En ese caso, hacía solo una semana que había salido del penal de Villa Floresta.