La hija del presidente de River que se casó con el arquero de Boca

La rivalidad entre clubes no cuenta cuando hablamos de amor. Esta pareja se salió con la suya causandole un disgusto a más de uno.

La hija del presidente de River que se casó con el arquero de Boca
Susana Degrossi, hija del expresidente de River José Degrossi, y esposa del arquero de Boca Claudio Vacca\u002E

Susana Degrossi llegó tarde a su propia boda. No eran nervios de último momento ni un tráfico imprevisto; es que se le hacía imposible salir de su casa para ir a la iglesia a casarse con quien era nada más y nada menos que un enemigo futbolístico de la familia.

Degrossi se casó el 1° de marzo de 1945 con Claudio Vacca, arquero titual de Boca en ese entonces. Pero trambién era hija de José Degrossi, presidente de River en dos oportunidades (1936-1938 y 1940-1942). Hoy recuerda esa historia con alegría, a los 92 años de edad.

Es que los Degrossi vivieron toda la vida en el barrio de La Boca, incluso cuando River ya estaba instalado en Núñez. Ese 1° de Marzo, hubo que llamar a la policía para que Susana pudiera salir. Pero no por un hecho violento, sino porque la algarabía era tal que no podía atravesar la puerta.

El casamiento de Susana Degrassi y Claudio Vacca, primicia en 1945.
El casamiento de Susana Degrassi y Claudio Vacca, primicia en 1945.

Quienes le impedían la circulación eran los hinchas de ambos equipos, que por entonces convivían en el barrio de forma pacífica: "¡Claro que no pasaba nada! - cuenta Susana al diario La Nación-, porque cuando ganaba Boca, la Boca era una fiesta. Y cuando ganaba River, también. Porque la mitad de la gente era de Boca y la mitad era de River".

¿Su padre odiaba a su marido por ser el arquero del equipo rival? Para nada. "Papá lo quería como un hijo a Claudio", cuenta Susana. Las escenas familiares de domingo con el arquero de Boca y el presidente de River fueron normales después de los superclásicos. Hablaban del partido y jugaban a la canasta. "Jamás una discusión", recuerda.

Vacca falleció en 1995, a los 79 años. Veintitrés años después, Susana lo recuerda con cariño, y añora esos tiempos en los que el barrio pertenecía a los dos equipos por igual.